El Vaticano pide vigilar a la secta Opus Angelorum
"El Vaticano"
Por órdenes de El Vaticano, los obispos católicos del mundo deberán vigilar las actividades de una secta secreta, que intenta combatir demonios por medio de oraciones a los ángeles.
La secta Opus Angelorum -que significa "el trabajo de los ángeles"- fue fundada por un ama de casa austríaca llamada Gabriela Bitterlich, que murió en 1978.
Bitterlich creyó haber identificado los nombres de cientos de demonios y ángeles que luchaban por el control de los seres humanos. Ella, además, aseguró haber contactado a un arcángel y haber escrito los nombres de cientos de ángeles y demonios.
La secta asegura que las mujeres que han tenido abortos están poseídas por el demonio.
"Las actividades de los seguidores de la señora Bitterlich, entre los que se incluyen docenas de monjas y sacerdotes católicos, atrajeron la atención de El Vaticano, que ha decidido ordenar una investigación".
Sin herejía
La Congregación para la Doctrina de la Fe, órgano de El Vaticano que estuvo presidido durante más de 25 años por el Cardenal Joseph Ratzinger -el actual papa Benedicto XVI-, ha exonerado a la secta de acusaciones de herejía.
Al mismo tiempo, sin embargo, ha advertido a los obispos que deberán vigilar de cerca a los sacerdotes católicos que promueven activamente este movimiento que se rehúsa a aceptar el control de Roma.
No se conoce conexión alguna entre Opus Angelorum y la novela bestseller"Ángeles y Demonios", escrita por Dan Browne, a quien El Vaticano ha criticado por sus trabajos de ficción que involucran a la Iglesia Católica.