En 204 días en la Cárcel Nacional de Maracaibo, en el sector Sabaneta, se han registrado 22 muertes entre motines y reyertas según registros policiales.
El último episodio violento ocurrió el pasado viernes cuando lanzaron dos granadas en el área de Procemil y hubo un intenso tiroteo por dos horas que dejó a dos internos muertos y cinco heridos.
Este sábado, Elvis Villalobos, supervisor de investigación del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de la delegación Zulia, aseguró que la riña se originó “entre los internos por el dominio de los pabellones”.
La defensora del Pueblo en el Zulia, Rebeca Del Gallego, aseguró: “La situación ya está normalizada. La información que se nos ofreció es que la riña ocurrió entre Procemil y Calabozo. Fueron dos ex policías (internos) muertos y cinco heridos, de los cuales tres ya fueron dados de alta”.
El Cicpc identificó a los fallecidos como Daxon Daniel Andrade, de 36 años y Juan José Flores Cubillán, de 33. El primero pagaba condena por el delito de homicidio ante el Juzgado Cuarto de Ejecución y el segundo estaba penado a 5 años de prisión por homicidio calificado ante el Juzgado Tercero de Ejecución.
Los heridos se mantienen estables y fueron identificados como Jean Carlos Chaparro Tejedor, de 32 años, condenado a 4 años por robo de vehículo, Freddy Javier Peña, de 26, penado a 5 años por robo, Reinaldo Alejandro Matheus Morales, de 22, con pena de 3 años y cuatro meses por robo de vehículo y porte ilícito de arma de fuego.
También Jean Carlos Villa Aguirre, de 22, condenado a 5 años por robo, y Reinaldo Antonio Medina Mendoza, de 25 años, que purga condena de 10 años por robo y lesiones.
Ayer las autoridades no ofrecieron declaraciones oficiales sobre la “intervención integral” anunciada por el comandante del Destacamento 35, de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), coronel Ludwing Pálima Cisneros.
El comandante había asegurado, tras la reyerta del viernes, que esperaban órdenes del Ministerio de Interior y Justicia a través de la Dirección General de Prisiones, para proceder a la intervención en dos áreas: la de seguridad y la atención integral a los presos.
Una fuente penitenciaria explicó que la atención al privado de libertad consiste en darle celeridad a los procesos penales y disminuir el nivel de hacinamiento del recinto.
Del Gallego aseveró: “Ya hicimos un informe sobre los internos que pudieran recibir ayuda humanitaria, son procesados y penados que tienen una enfermedad terminal grave, pero es un número reducido”.
“Se evalúa la posibilidad de persuadir a los reclusos, a través de sus familiares, a que depongan la actitud violenta y permitan las requisas”, expresó una fuente ligada al centro de arrestos. La medida de intervención aún no tiene fecha.
Los casos más emblemáticos de fallecidos dentro del penal durante el primer semestre de 2011 fue el homicidio de Franyer Infante, de 25 años, ocurrido durante la celebración de cumpleaños de un recluso.
También, el pasado 14 de junio, una riña en el área de Máxima, de la cárcel de Sabaneta, dejó muertos a tres reclusos.
“Hay que darle atención al interno y conminarlo a que depongan la actitud violenta, eso forma parte del cambio, se tiene que evitar que se registren más muertes innecesarias”, precisó una fuente carcelaria.
El último episodio violento ocurrió el pasado viernes cuando lanzaron dos granadas en el área de Procemil y hubo un intenso tiroteo por dos horas que dejó a dos internos muertos y cinco heridos.
Este sábado, Elvis Villalobos, supervisor de investigación del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de la delegación Zulia, aseguró que la riña se originó “entre los internos por el dominio de los pabellones”.
La defensora del Pueblo en el Zulia, Rebeca Del Gallego, aseguró: “La situación ya está normalizada. La información que se nos ofreció es que la riña ocurrió entre Procemil y Calabozo. Fueron dos ex policías (internos) muertos y cinco heridos, de los cuales tres ya fueron dados de alta”.
El Cicpc identificó a los fallecidos como Daxon Daniel Andrade, de 36 años y Juan José Flores Cubillán, de 33. El primero pagaba condena por el delito de homicidio ante el Juzgado Cuarto de Ejecución y el segundo estaba penado a 5 años de prisión por homicidio calificado ante el Juzgado Tercero de Ejecución.
Los heridos se mantienen estables y fueron identificados como Jean Carlos Chaparro Tejedor, de 32 años, condenado a 4 años por robo de vehículo, Freddy Javier Peña, de 26, penado a 5 años por robo, Reinaldo Alejandro Matheus Morales, de 22, con pena de 3 años y cuatro meses por robo de vehículo y porte ilícito de arma de fuego.
También Jean Carlos Villa Aguirre, de 22, condenado a 5 años por robo, y Reinaldo Antonio Medina Mendoza, de 25 años, que purga condena de 10 años por robo y lesiones.
Ayer las autoridades no ofrecieron declaraciones oficiales sobre la “intervención integral” anunciada por el comandante del Destacamento 35, de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), coronel Ludwing Pálima Cisneros.
El comandante había asegurado, tras la reyerta del viernes, que esperaban órdenes del Ministerio de Interior y Justicia a través de la Dirección General de Prisiones, para proceder a la intervención en dos áreas: la de seguridad y la atención integral a los presos.
Una fuente penitenciaria explicó que la atención al privado de libertad consiste en darle celeridad a los procesos penales y disminuir el nivel de hacinamiento del recinto.
Del Gallego aseveró: “Ya hicimos un informe sobre los internos que pudieran recibir ayuda humanitaria, son procesados y penados que tienen una enfermedad terminal grave, pero es un número reducido”.
“Se evalúa la posibilidad de persuadir a los reclusos, a través de sus familiares, a que depongan la actitud violenta y permitan las requisas”, expresó una fuente ligada al centro de arrestos. La medida de intervención aún no tiene fecha.
Los casos más emblemáticos de fallecidos dentro del penal durante el primer semestre de 2011 fue el homicidio de Franyer Infante, de 25 años, ocurrido durante la celebración de cumpleaños de un recluso.
También, el pasado 14 de junio, una riña en el área de Máxima, de la cárcel de Sabaneta, dejó muertos a tres reclusos.
“Hay que darle atención al interno y conminarlo a que depongan la actitud violenta, eso forma parte del cambio, se tiene que evitar que se registren más muertes innecesarias”, precisó una fuente carcelaria.
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