MÉXICO | Informe de la Comisión Nacional de Derechos Humanos
Seis de cada diez cárceles mexicanas están dominadas por los propios presos que controlan camas, celdas, privilegios, asuntos relacionados con la seguridad, prostitutas, drogas... Y en las que no hay 'autogobierno' se da el 'cogobierno', es decir, reos y funcionarios se reparten la operatividad de la cárcel. En otros casos la comida de los presos no cumple condiciones de higiene o corren aguas fecales bajo la cama de los presos.
Éstas son algunas de las conclusiones del informe sobre la situación de las prisiones en México presentado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) quien constató, tras visitar 100 cárceles, que en el 60% de los centros penitenciaros del país prevalece el 'autogobierno'. En otras prisiones, como la de Piedras Negras (Coahuila), el personal de Derechos Humanos ni siquiera pudo entrar, pues los reos tenían hastalas llaves de celdas y candados.
La CNDH constató la existencia de privilegios, "hay grupos que ejercenviolencia o control sobre el resto de la población, cobros indebidos para la protección personal, la asignación de estancia o plancha para dormir, pase de lista, mantenimiento de dormitorios, acceso a alimentos y a servicios médicos", explicó el presidente de la CNDH Raúl Villanueva Plasencia.
Imposibilita la reinserción
Plasencia denunció la sobrepoblación y el hacinamiento tras las rejas lo que imposibilita la reinserción. Según la CNDH las cárceles tienen una capacidad para 190.000 presos aunque actualmente albergan a 240.000. Los centros penitenciarios en el país "atraviesan una crisis delicada" por la falta de políticas públicas en la materia, denunció el Ombudsman (Defensor del Pueblo).
Las cárceles más deterioradas o sobre las que el Estado no tiene control están en Campeche, Chiapas, Durango, Guerrero, Jalisco, Michoacán o Tamaulipas.
El caso más llamativo fue el de la cárcel de Piedras Negras (Coahuila), donde debido a las condiciones de seguridad el personal de Derechos Humanos no pudo ni ingresar el edificio. Precisamente la semana pasada se fugaron 132 presos por la puerta del taller de carpintería de esta cárcel del norte del país. En algunos penales las autoridades no les permitieron recorrer las instalaciones bajo el argumento de que los presos "tenían las llaves de los candados" de algunos lugares, incluidas celdas.
521 fugados en un año
Sólo entre 2010 y 2011, el organismo de Derechos Humanos registró 14 fugas en las que se fugaron 521 presos. Otros 352 reos fueron asesinados, casi siempre apuñalados, en 75 peleas desatadas en los dos últimos dos años.
Sobre la práctica de la tortura, la CNDH señaló que la corrupción y el autogobierno generan casos de maltrato realizados por grupos de internos y custodios que golpean con objetos, pies y puños a los internos, incluso hasta provocarles la muerte.
La oficina de DDHH llamó la atención sobre la existencia de zonas de aislamiento o tortura donde los presos no pueden ni siquiera estar de pie. También sobre la ínfima calidad de los alimentos que reciben los presos, y que no cumple ni las mínimas normas de higiene, lo que obliga a los familiares a llevarles comida. En algunos dormitorios corren aguas fecales, resultado del deterioro en el que se encuentran las instalaciones.
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