Los 4.200 reos de la Penitenciaria La Esperanza, en la periferia norte de San Salvador, pidieron este jueves a la iglesia católica interceder ante las autoridades carcelarias para que se les capacite en oficios productivos, que les permitan reinsertarse en la sociedad.
"Queremos tener la oportunidad de reinsertarnos a la sociedad como personas productivas, y por eso estamos pidiendo que la iglesia católica a través de monseñor Fabio Colindres interceda por nosotros para que las autoridades nos brinden esa oportunidad", dijo en rueda de prensa el reo Carlos Serrano, vocero de los presos.
Serrano indicó que piden la intervención de Colindres, vicario castrense, porque "ha sido ejemplar su labor" al mediar en una tregua de no agresión entre las dos principales pandillas que operan en el país.
El acuerdo entre las pandillas o maras ha permitido que desde el pasado 9 de marzo se redujera de 14 a 5 el promedio diario de homicidios en el país.
"Así como las pandillas han dicho que se arrepienten de lo malo que hicieron, nosotros también, pedimos perdón a la sociedad por todo lo malo que hicimos", remarcó Serrano, quien estuvo acompañado por una veintena de reos de La Esperanza, el centro penitenciario más grande del país.
De acuerdo con la Dirección General de Centros Penales, en La Esperanza los reos pueden participar en programas de capacitación laboral en oficios como panadería, carpintería y sastrería..
El vocero de los reos también indicó que han pedido a las autoridades penitenciarias que se les mejore sus condiciones de encierro en donde prevalece el hacinamiento, así como también una mejor atención de salud y de alimentación.
Como "una muestra de buena voluntad" de que desean "ser mejores personas", los reos se comprometieron a "no permitir que al penal se ingresen cosas prohibidas como (teléfonos) celulares o droga", concluyó Serrano.
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